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Quizá quieres crear una marca o diseñar tu logo, una página web de calidad o inventar un nombre chulo… bueno puede parecer fácil, pero ninguno de estos trabajos lo es, es un proceso profesional complejo que está incluido dentro de la creación de una marca.

Todos queremos una marca potente que sea memorable que domine el mercado, vender, vender más y mucho más… buen vamos a ver como es todo este proceso y todo el esfuerzo, tiempo y presupuesto que hay detrás… a ver si podemos abarcar todo o si no nos pondremos manos a la obra con futuros artículos que amplíen este tema tan interesante.

¡Crear una nueva marca!

Todo el mundo sueña con ser propietario de una marca de postín, ganar dinero a raudales y vivir la vida con intensidad. Ahora, despierta. ¿Ya estás en la realidad real? ¡Bienvenido!

En este post te vamos a mostrar a grandes rasgos el proceso de creación de una marca y de posicionarla lo más alto posible en la lista de resultados de Google y de otros motores de búsqueda.

Antes de entrar de lleno en el meollo de la cuestión, tres consejos de balde:

  1. La tarea es compleja. No escuches cantos de sirena de embaucadores a tiempo completo, gurús de medio pelo o tertulianos boca-chanclas.
  2. La reputación online no cae del cielo. Hay que conquistarla minuto a minuto… y cuando estés en la cresta de la ola, no te duermas en los laureles: puedes bajar al sótano del anonimato en un pispás.
  3. Busca la ayuda y asesoramiento especialistas acreditados en diseño web y en estrategias de optimización SEO y marketing digital. El dinero no llueve del cielo para ganar hay que invertir.

 

Proceso rápido de creación de una marca desde cero

Lo hemos dividido en cuatro instantes muy genéricos para ayudar a la comprensión inmediata e intuitiva de un procedimiento de por sí bastante complejo.

  1. Tiempo de tormentas. Estamos en la previa del partido del siglo, la manida tormenta de ideas. Tienes que ser una esponja, escuchar todas las opiniones, crear de la nada, decir lo primero que te venga a la mente, apuntarlo todo, desechar ideas para volver a ellas desde otras perspectivas, reírte de ti mismo y de todo, ponerte serio, analizar la viabilidad de cinco propuestas distintas, reducirlas a tres nada más, llegar a la gran final de tu proyecto entre dos contendientes imaginarios, the winner is… Tu nueva marca ya está en marcha, on the road, simplemente on.
  2. Fase gráfica inicial. El protagonista es ahora el diseñador gráfico. Hay que trabajar el logotipo y la imagen corporativa. Las ideas empiezan a perfilarse y tomar forma despacio pero sin pausa. Tu logo debe ser original y destacar de la competencia por derecho propio. Tiene que transmitir tus valores propios. Ha de tener acusada personalidad, que llame la atención a primera vista. Debe trasladar energía y vitalidad, que el mundo gire a su alrededor y que los alrededores se muevan por su causa: con elegancia, sin gestos afectados, presuntuosos o innecesarios. En esta fase hay que pensar en muchas cuestiones estéticas y técnicas. Los colores principales y los secundarios: que se lleven bien, que sean complementarios, que no riñan entre sí. Las formas: abstractas, figurativas, geométricas, fractales, que encajen perfectamente con diseños bi y tridimensionales. El estilo de las tipografías y el uso de manual de subrayados, cursivas y negritas. Los símbolos e iconos para identificar elementos gráficos accesorios o de segundo orden. Hay que pensar también en cartelería, folletos, catálogos, pancartas, presentaciones… Aún estamos offline, pero no está de más anticiparse a las soluciones digitales de la siguiente etapa.
  3. Etapa web. Nos adentramos en el territorio genuino del diseñador web y del marketing online puro y duro. Lo primero es lo primero: trazar una arquitectura o estructura web navegable para todo tipo de visitantes. Hay que ponerse siempre en el lugar del usuario, vivir su experiencia desde su particular punto de vista. Cuando ya tengamos en esquema la estructura web hay que establecer un menú provisional coherente, las secciones con sus someras metadescripciones y las categorías de los contenidos y sus diversos formatos (imágenes, podcasts, vídeos, textos, multimedia). Elegimos colores y tipografías (en algunos casos serán obligatoriamente los mismos ya elegidos en la fase dedicada al diseño gráfico de la marca). Hay que pensar igualmente en la inclusión o no de contenidos patrocinados y/o banners de publicidad. Es el instante crucial de seleccionar una plantilla o tema para la página de inicio y la estética general. ¿Necesitamos reservar espacio para comercio electrónico? ¿Vamos a redactar un blog con noticias de actualidad y artículos de máximo interés? No olvides tampoco bajarte un editor/maquetador de garantía.
  4. Momento final para las redes sociales. ¿En todas o solo en algunas? Crea los perfiles. Interacciona y participa activamente. Dialoga con tus followers y potenciales clientes. Sé creativo. Sé empático. No seas polémico. No quieras llevar siempre la razón. Escucha con atención. Habla o escribe de lo que sabes, estrictamente de nada más de lo que sabes.

 

Vendiendo urbi et orbi tu nueva marca

  • Buscando tu cliente-tipo. Debes saber sin duda alguna a qué sector (o sectores) perteneces. En ocasiones, la actividad regular te marca fronteras fijas, otras veces las lindes no están tan claras y puedes recorrer diferentes territorios comerciales en libertad de movimientos total. Una vez definido el sector/sectores de actividad, es el momento preciso de hallar tu público-objetivo y tus targets segmentados en grupos más reducidos. Hay muchos factores y variantes de estudio y análisis. Sexo. Género. Edad. Educación y cultura. Manías y prejuicios. Clase social. Estilo de vida. Poder económico. Etnia. Ideología y religión. Valores morales. Aunque definas el target en su mínima expresión deja siempre la alternativa a encajar en otros nichos opcionales. Una vez conozcas en profundidad tu público-objetivo ya podrás realizar estrategias puntuales o masivas de marketing personalizado. Eso lleva tiempo.
  • En una palabra, SEO. Entramos en la optimización de posicionamiento SEO. Ya es un clásico con todos los honores en cualquier estrategia de marketing online en todo el mundo. Quizá necesites ayuda de Google Adwords, SEMrush o una agencia especializada para determinar las keywords que se llevan en tu sector de actividad, que mejor conectan con tu target favorito y que Google y otros motores de búsqueda consideran más populares, relevantes y/o de autoridad para aparecer las primeras en sus listas de resultados. Cuando hayas seleccionado los términos que vengan mejor a tu marca (producto, servicio), clasifícalos de menos a más: primero los que se posicionan con gran facilidad en Google en los primeros lugares de búsqueda y después los que son más difíciles de entrar en los puestos preferentes del ránking. Diseña un manual de estilo en el que las keywords elegidas aparezcan siempre en el título, metadescripcion y párrafos iniciales de tus textos, incluyendo ad lib citas de autoridad de prestigio intachable y enlaces de calidad a otras webs o blogs de elevada reputación online.
  • Dicho y hecho (o escrito). Vas a redactar contenidos para tu blog. Piensa en las palabras-clave. Piensa en Google. Piensa en tu público-objetivo. Utiliza un lenguaje ágil y sugerente apto para todos los públicos. Que los artículos no bajen de 300 palabras ni superen las 800, salvo excepciones justificadas. Juega con formatos multimedia: texto + imagen + vídeo + podcast + infografía. No necesariamente todo a la vez, ve combinando en función de tus necesidades.
  • Difunde tu mensaje sin prisas pero sin pausa. En redes sociales, por email marketing, a través de newsletters, boca a boca, en foros de discusión, en portales profesionales, en marketplaces… Échale imaginación al asunto. Otra posibilidad en auge es que hagas guest posting, es decir, que publiques como autor invitado en otras websites o blogs o en medios de comunicación digitales independientes. El guest posting bien empleado te permitirá hacer linkbuilding (conseguir enlaces externos a tu blog o sitio web), aumentar tu visibilidad en internet (gratis o pagando) y elevar tu reputación online considerablemente.

 

Te lo hemos resumido mucho, mucho, mucho. No obstante, te habrás dado cuenta que posicionar una nueva marca en el mercado cibernético no es tarea de un solo día que admita improvisaciones de agárrame el cubata que allá voy por mis santos (omitir palabra así como alternativas políticamente correctas). En cualquier caso, pensamos que este texto te ofrece sugerencias para marcar una hoja de ruta sencilla que pueda ayudarte en la tarea de crear una marca desde la nada y de darla a conocer con éxito en un plazo de tiempo razonable.

En ideaWeb llevamos muchos años diseñando logotipos, webs de empresa y blogs profesionales y lanzando al mercado marcas de todo tipo. Somos especialistas madrileños en diseño web y marketing online.

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