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No solo en diseño web, dicen que la experiencia es un grado. Así será si así lo dicen los que tienen experiencia. Como tú, somos fanáticos del diseño web, pero ojo amigos y amigas antes de tirarse al precipicio y hacer una página web a lo loco hay que tener en cuenta algunos consejos muy sensatos para no tropezar en baches y zanjas invisibles que nos pueden dificultar la tarea de estrenar nuestra web por todo lo alto.

a la hoira de diseñor una página web hay que tener en cuenta muchos aspectos, cada día más, antes hace pocos años relativamente, creabas un diseño en photoshop, o un mirando poco más atrás, generabas unas tablas en dreamweaver , le metías un logo, unas imágenes y unos textos y… zumbando… ahora la cosas no es así. El SEO, la variedad de dispositivos y pantallas del mercado, la competnecia y docenas de características técnicas hacen que una web se haya vuelto mas compleja de que era hace pocos años.

Vamos a intentar darte algunos tips o conejos para diseñar tu página web, que contra lo que otros dicen por ahí para venderte humo y «chismes» prefabricados, no es una cosa sencilla hoy en dia.

Contenidos web de calidad

¿De verdad sabes lo que quieres? ¿Lo sabes todo acerca de tu sector? ¿Te sientes fuerte en tus conocimientos? ¿Conoces tus limitaciones?
No queremos ser agoreros, pero plantearse un negocio no debe hacerse a la ligera. No te subestimes mas tampoco te creas el rey del mambo. Todos tenemos mucho que aprender de todos.
Una web no se llena solo de buenas ideas y grandes ilusiones. Un factor clave son los contenidos, que sean de calidad y originales. Si tú no puedes con todo ello, acude a los profesionales. Repite con nosotros, por favor, contenidos de calidad y originales.
No cuides solo la portada de tu web. Eres más que una mera fachada. El resto de habitaciones deben dar una imagen aseada de tu casa. Piensa bien en los contenidos y en la utilidad de cada entrada. No seas redundante, que cada espacio cuente algo interesante de ti.
Tampoco estaría de más que pienses en la elaboración de un blog con inclusión de artículos sobre tu sector de actividad y otras noticias relacionadas con el objeto comercial de tu empresa o profesión. Un blog bien diseñado precisa renovación permanente, dinamismo, frescura, rabiosa actualidad. Si no puedes escribirlo tú y puedes permitírtelo, acude a una agencia o redactor especializado.
Y, por favor, no racanees con fotos-basura. Invierte en imágenes originales y de calidad contrastada. Pequeños detalles pueden dar al traste con la excelencia de una web bien diseñada. Tampoco subas audiovisuales interminables, con 30 segundos es más que suficiente, salvo que sean tutoriales informativos amenos e instructivos.

Más web puede ser menos

Reconoce con nosotros que internet está lleno de morralla aburrida y tediosas informaciones largas y pesadas a más no poder. Grábate en la mente este axioma, lo bueno si breve dos veces bueno. Si quieres apunta esta máxima más culta de Baltasar Gracián, más valen quintaesencias que fárragos.
Una web ágil, concisa e interactiva es una bendición. Escribe con lenguaje suelto y directo. Da pequeños sorbos de información interesante y significativa. Datos que sean fáciles de digerir. Ya sabes, mejor una tapa suculenta con caña que un menú copioso e interminable.

Vende en tu web con estilo y elegancia

Es buena idea ser directo e ir al grano, pero con cuidado, ganando terreno poco a poco, seduciendo con sonrisas, dando tiempo al tiempo. Las mejores cosechas se hacen con cariño, mimo, empatía y paciencia. Como el buen vino.
Los visitantes de tu web no deben sentir prisa, antes al contrario han de hallar un sitio acogedor donde sus deseos vayan conectando con tu producto o servicio de modo natural, sin estridencias ni urgencias comerciales.
Inventa un relato convincente de ti o tu empresa. A la gente normal nos encanta que nos cuenten cuentos, que nos arrullen con una historia que deje volar nuestra fantasía. En este ambiente cálido, si tu web es suficientemente buena la venta vendrá por si sola. Recuerda que lo primero que se graba en nuestra tierna mente de bebé son las nanas de nuestra madre o abuela.

¡Rodando! ¡3, 2, 1, acción!

Tienes al cliente a punto de caramelo. Tu web le fascina, está a gusto en ella. Le encanta lo que ha leído y conecta con tu filosofía o punto de vista. Falta el siguiente paso: contactar contigo para resolver alguna duda o bien contratar tus servicios profesionales o adquirir algún producto de tu catálogo. Dale pistas que parezcan intuitivas, muévele subliminalmente el ratón hacia ti. No confies en que todos los caminos llevan a Roma; asegúrate de que llegan a Roma con toda seguridad. No te fies de las web intuitivas. El internet hay tantos ruidos ambientales que perderse en su galimatías funcional es tremendamente fácil.

Lleva de la mano al visitante

Busca la eficiencia y sé claro y transparente. No marees la perdiz con imágenes espectaculares que desvíen la atención del potencial cliente. Demasiados ítems aturullan y confunden. Sigue estos sencillos pasos para conseguir que tu web se transforma en una herramienta útil para tu negocio: quién soy, qué ofrezco, qué pienso de la vida, tú me necesitas, ven conmigo. Ahí tienes el camino completo para alcanzar el éxito seguro. No te compliques. Si tu web da respuesta a esas inquietudes, entonces puedes decir con orgullo que tu página es una buena web.
La navegación por tu web debe ser rápida sin interferencias innecesarias. No pongas trampas ni plantees laberintos insufribles. Pon señales para que los visitantes se sientan seguros. Si se pierden o se hartan de tu página web, es tu culpa. No lo dudes.

Todo el mundo es demasiado

Público objetivo, target, nichos específicos, mercados reducidos… Te lo diremos con menos tecnicismos: dirígete a los tuyos, al grupo de clientes que pueden estar verdaderamente interesados en tu servicio o producto. No mates moscas a cañonazos. Si te diriges al mundo entero, tu clientela o target concreto no te encontrará en internet. Habla el lenguaje de tus potenciales clientes: un mensaje sopesado y personalizado tiene un impacto publicitario mayor que un mensaje genérico. Es una ley básica del marketing.
Y usa Google Analytics para medir el tráfico a tu página web. Te servirá de mucho para tomar decisiones mejor informadas.

No te olvides de ti

Son tantos los problemas cotidianos, tantas las exigencias de ganarse la vida con dignidad, que en ocasiones nos olvidamos de cosas nimias o consabidas pero la mar de importantes. Vitales diríamos nosotros. Ya tienes la web a pleno funcionamiento pero jamás olvides, tomátelo como una rutina semanal, tener activas y actualizadas las formas de contactar contigo. En serio, es un olvido muy común precisamente por lo obvio que es.

En web ya solo somos móviles

Exije que tu web sea visitable a través de teléfonos móviles, Google ya no quieres webs que solo se vean en monitores grandes, el diseño responsive llegó, se quedó y venció, ahora Google indexa unicamente la versión para móviles de tu web.

Por otra parte y si no te habías planteado el por qué…piensa que en el mundo hay alrededor de 8.000 millones de móviles. Más que personas. El comercio electrónico no es el futuro, es ya, ahora, el presente más presente que puedas imaginar. Una web preciosa nada es si no puede verse perfectamente en los teléfonos móviles.

¡SEO, SEO, SEO!

A día de hoy, un diseño web que no incluya procesos y análisis de posicionamiento SEO es un proyecto cojo. SEO no es una palabra mágica que invoca al éxito de balde. Cuesta salir en Google. Estamos ante una carrera de obstáculos que hay que ir superando con tesón… experimentación, tiempo, esfuerzo y (pa)ciencia.

Rapidez de carga

Quédate con esta melodía, te será muy útil: que tu página de inicio sea sencilla y con estilo, que cargue a la velocidad del rayo, no quieras decirlo todo de un tirón.
Debes tener en cuenta a la hora de diseñar tu web los dispositivos de carga y la velocidad de conexión necesaria para que tu página sea visible con facilidad. No te metas en complejidades técnicas estrafalarias que impidan que tu página de inicio se transforme en una sonrisa franca y directa para el visitante. Tu mirada debe cargar en menos que canta un gallo. Es crucial para que los visitantes no pasen de largo.

No te obsesiones con las keywords

Los algoritmos de Google hegemonizan el universo virtual. Muchos intentan engañarlos mediante palabras tótem o clave para encaramarse a los primeros lugares de los motores de búsqueda. Atiborran de esas palabras mágicas (keywords) sus textos aunque no vengan a cuento, solamente para seducir a los algoritmos robóticos del imperio Google. Acción infructuosa. Google sabe que los huevos rotos tradicionales se componen de patatas fritas, jamón y huevos, evidentemente. Si añades pimientos, morcilla u otro ingrediente novedoso, los algoritmos, muy cucos ellos, saben que “eso” ya no son los clásicos huevos rotos.
Otrosí: poner links a lo tonto que no tengan nada que ver con la web es saturar la página y hacerla demasiado pesada y veleidosa. Limita tus impulsos de grandeza.
Renueva tu web. ¿No tienes página aún? ¿A qué esperas?

Rediseña tu vieja página web

Lo dicho hasta aquí viene al caso para abordar un proyecto nuevo de diseño web. Ahora queremos hablaros, de modo muy esquemático, de la renovación de una página web ya en uso (casi todo lo dicho antes vale también para este supuesto).
Dependiendo del sector al que pertenezca tu empresa (o tú personalmente como profesional autónomo), es recomendable un nuevo diseño de la página en vigor de uno a 5 años. Todo va en función del dinamismo del sector de actividad: unos negocios demandan cambios de imagen y contenidos muy veloces y otros modificaciones más pausadas. De lo que se trata en el fondo es de no perder el tren de ventas y mantener o aumentar el tráfico de visitas y potenciales clientes a tu web.

Análisis de la página web actual

En términos comerciales diríamos hacer inventario o balance, esto es, conocer al detalle la realidad de la web desde todos los ángulos y perspectivas posibles. No estaría de más hacer uso de la herramienta gratuita Google Analytics. La pregunta fundamental a responder sería, ¿cómo abren la puerta de nuestra web los internautas y qué hacen dentro de ella?
Una vez tengas un resultado convincente de tus pesquisas, no lo dudes, corta por lo sano las páginas y contenidos dañinos o insignificantes. Que no te duelan prendas. Acto seguido piensa con detenimiento en nuevos cosas que deberías agregar (mira lo que funciona en la competencia y sé atrevido: innova, rompe las inercias nocivas, marca estilo propio).

Tormenta de ideas

Hazte un esquema general flexible de cómo visualizas la página web renovada. Ve escribiendo lo que se te ocurra de buenas a primeras, ya irás depurando después los textos brutos, tirando las tonterías a la basura y elevando al altar tus propias genialidades (cree en ti, por diminuto que sea todos albergamos algo especial dentro de nosotros; sácalo a flote, sin vergüenza).

Piensa en textos pero igualmente en imágenes: fotos, gráficos y audiovisuales también son “contenido”. Recopila todo lo que te guste, ya llegará el momento de decidir si utilizas imágenes propias, de un banco o las mandas hacer ex profeso a un profesional.

¡Allá vamos!

¿Cuántas páginas tendrá tu página web? ¿Por dónde empezamos? Cada diseñador tiene su preferencia o manía. ¿Primero la cara, o sea, la página inicial? Cualquier respuesta es válida. Cada artista crea y recrea mundos particulares.

Previo al diseño efectivo, tal como hacen los pintores con sus bocetos y los escultores con modelaciones de menor tamaño que la obra definitiva en, por ejemplo, escayola u otra materia barata, un buen diseñador debe llevar su idea genérica a un prototipo o wireframe. Puedes elegir mútiples editores: GIMP, Inkscape, Krita, Pain.Net, Photopea, Photoscape, Photosop, PicMonkey, Pixlr… La lista es amplísima.

Colores y tipografías web

Parece un capítulo menor pero internet está plagado de websites que parecen ensaladas con mil ingredientes de colores que ciegan la vista y escrito como una sopa de letras tan espectacularmente confuso que nadie puede leer nada en ella.

Seremos muy drásticos: escoge unoo dos colores primarios y otros uno o dos secundarios, que liguen bien entre sí y que resalten unos con otros cuando se apliquen indistintamente como fondo o como texto.

Ahora debemos decantarnos por fuentes ¡siempre bien legibles! Lo dicho para los colores también es válido aquí: un par de colores es más que suficiente.

Tipografías y colores que hagan buenas migas son esenciales a la hora de atrapar visitantes que deambulan por internet sin destino fijo con el fin de centrar su atención desvaída. Haz la prueba entrando en varias web para que entiendas prácticamente lo que te decimos.

Casi ya está lista tu web…

La parte teórica está ultimada. Queda lo pragmatico. Que el prototipo se transforme en tu atractiva website.
No profundizaremos en esta etapa. Solo recordar algunas ideas muy importantes.
1. Resulta muy aconsejable realizar un check in SEO de tu vieja web para optimizar la nueva. Los errores y fallos detectados, tanto técnicos, de diseño o de tráfico de visitas, se evitarán en la web en marcha.
2. Procura mantener la misma URL o que las variantes sean mínimas. Puede ser útil, si te lo puedes permitir económicamente, que convivan durante un tiempo la vieja y la nueva website, redirigiendo de la primera a la segunda a todos los visitantes, potenciales clientes y clientes habituales.
3. Revisa minuciosamente las cargas y los códigos en HTML (lenguaje web), CSS (presentación de documentos) y CMS (sistema de gestión de contenidos).
4. Comprueba, poniéndote con empatía en el lugar de tu cliente, que la experiencia de usuario es la deseada por ti (front end).
5. Verifica que las tripas de la web funcionan con la lógica programada (back end).
6. Escucha a terceras personas y perspectivas distintas a las tuyas. Y retoca si es necesario. No te cierres en banda porque sí. Todo es mejorable, hasta lo excelente. Eso se llama feed back.

¡Disfruta de tu renovada página web! Tiene una pinta muy apetecible.

¡Ehhh! Se nos olvidaba, ¿has pensado en externalizar el diseño de tu página web? algunos de nuestros clientes lo intentaron y no fué posible, no todos tenemos que saber de todo hay trabajos que tenemos que dejar en manos de quien sabe y de gente profesional, a´siq ue si has dedicado horas, lo has intentado y has llegado al punto de: «!!No puedo más lo dejo!!»  déjalo pero déjalo en buenas manos. No lo dejes en manos de cualquiera, una página web profesional tiene muchos mejores resultados que la que te hace tu amiguete informático. Hasta que no la tengas no lo sabrás. Si tienes cualquier necesidad de diseño, desarrollo o mantenimiento web cuenta con ideaWeb somos diseñadores web profesionales casi desde los comienzos de internet, seguro que podemos mejorar tus ventas con una buena página web.

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